MOVIMIENTO PERUPUEBLO

CARTA DE AGRADECIMIENTO DE JAIME RAMIREZ PEDRAZA LEIDO EN LA VIGILIA DEL 4 DE MAYO EN SOLIDARIDAD CON ENFERMOS DE ELA Y SU LUCHA POR EL INDULTO HUMANITARIO

“Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos; y de los maltratados como que también vosotros mismos estáis en el cuerpo.”
Hebreos 13: 3

Lima 4 de mayo de 2012.

Queridos familiares, amigos y personas de buen corazón, reciban un afectuoso saludo y mi eterna gratitud, por acompañarme con lo mejor de sus sentimientos de solidaridad y fraternidad en esta vigilia, por la humanidad y la dignidad que busca una vez más hacer conocer la grave enfermedad que vengo padeciendo y así poder sensibilizar a todos aquellos que de una u otra forma puedan sumarse a este pedido de indulto humanitario pero sobre todo a quienes tienen la facultad de decidir humanitariamente y no responder con indiferencia a tan justa petición.

Desde el lugar que me encuentro estoy espiritualmente con Uds., con mucha fe y esperanza que lograremos llegar a todos los corazones y conseguir el indulto para estar al lado de mis seres queridos.

 

Tengo sí un sentimiento encontrado que no logro comprender cómo es que hasta la fecha, a pesar de haber fundamentado con toda la documentación y la evidencia de mi estado de salud, además de la comprensión y apoyo de muchas personas, instituciones y personalidades públicas, se me sigue negando el indulto; al igual que a otros presos, que lamentablemente en estos momentos no pueden hacer oír su voz, porque ya se apagaron, sin haber podido pasar sus últimos días al lado de su familia, me refiero a cuatro enfermos de este penal (Miguel Castro Castro) quienes han fallecido en el transcurso de los últimos tres meses; convirtiéndose en letra muerta lo que el presidente Ollanta señalara en una entrevista que “ningún preso moriría en la cárcel”.

A veces pienso que esta cruel y vergonzosa realidad pueda desanimar a todos los que desde un inicio, hace mucho tiempo, en forma constante me han acompañado en esta campaña de solicitar un indulto humanitario. Sin embargo, conociendo ese inmenso amor y la fortaleza de sus convicciones, estoy seguro que ese desánimo se ha de convertir en mayor fuerza y motivación para seguir en esta brega, de manera incansable; como lo hacen, principalmente, el grupo de apoyo que se reúne todas las semanas, así como mi familia, los hermanos de la comunidad cristiana y mis compañeros de prisión que están permanentemente pendientes de mi situación.

Me alegra tremendamente que cada día se vayan sumando más personas entendiendo sin prejuicios la necesidad del indulto humanitario sin importar el tipo de delito. El reportaje del canal 9, a quienes desde esta tribuna agradezco, ha mostrado al Perú y al mundo la crueldad que significa tener en prisión a un paciente con la enfermedad ESCLEROSIS LATERAL AMIOTRÓFICA (ELA); hasta donde se conoce, el único caso en el mundo. Agradezco también, de todo corazón, a los hermanos que sin conocerme, me han apoyado dando testimonio de lo que significa este mal y pidiendo a las autoridades que me den el indulto, mostrando coherente, desgarradora y valientemente lo que sufre un paciente de ELA, aún cuando se encuentra en el calor y cuidado de su familia.

Es muy alentador, para mí, que luego de ese reportaje, muchas personas me han expresado su comprensión y solidaridad, ofreciendo incluso llevar esta campaña a otros países para desde ahí también se haga llegar la voz de solidaridad y el pedido de indulto humanitario, tal como se viene haciendo en estos momentos en provincias, sobre todo en mi ciudad natal.

Por mi parte, aunque el mal cada día me vaya consumiendo poco a poco, seguiré resistiendo con esa fuerza y esa esperanza que me da mi fe y convicciones. Soy consciente que me ha tocado cargar esta pesada cruz y lo vengo asumiendo con dignidad; también estoy seguro y convencido que finalmente se tocará las fibras más sensibles de las autoridades y que el mensaje de amor que Jesús dio a la humanidad ha de primar sobre cualquier otro sentimiento adverso.

Nuevamente mis eternos agradecimientos a cada uno de Uds. y a todos aquellos que han venido de una u otra forma haciendo posible la unidad de sentimientos y acciones a favor de mi persona y mi familia. Jehová bendiga el hogar de cada uno de Uds.

Jaime Armando Ramírez Pedraza

Penal Miguel Castro Castro.